CAPÍTULO 16: Apostando Al Amor

DEDICADO A LAS NUEVAS LECTORAS...

ALGUNAS FIRMITAS Y HAY MAS! =)

APOSTANDO AL AMOR

Capítulo XVI: un lugar seguro

                Peter pasó directamente a uno de los cuartos que quedaba en el tercer piso, él que había escogido para ella, la mansión era tres veces más grande que la casa, pero el terreno de esparcimiento era muchísimo más pequeño. La acostó en la cama con sumo cuidado para no despertarla y se acercó a su frente para darle un beso, pero en cuanto lo hizo ella suspiró y abrió los ojos.

-Peter…- murmuró sonriendo y mirándolo.

-descansa…- pidió en voz baja, esto parecía un sueño, desde que la secuestro solo en su imaginación estaba el hecho de que ella se despertara viéndolo con una sonrisa.

-¿a dónde vas?- preguntó alarmándose un poco, aparentemente él tenía intenciones de dejarla sola.

-Tranquila, este es tu cuarto, puedes descansar en paz, es un lugar seguro- dicho esto se levantó para dejarla dormir, pero Lali en vez de quedarse acostada se sentó en la cama de repente.

-voy contigo-anunció despertándose por completo.

-¿a dónde?- preguntó extrañado.

-a donde quiera que vayas- veía a su rededor un poco confundida, buscando su calzado para acompañarlo.

-yo voy a arreglar unos asuntos- anunció para que se acostara en paz.

-te acompaño-

-es mejor que te quedes descansando- sugirió

-prometo no molestar-quiso convencerlo y salió de la cama en busca de algo que colocar en sus pies, miraba el suelo con detenimiento.

-Lali…- dijo su nombre con seriedad.

-¡por favor, déjame ir! Te juro que no molestaré- y allí fue cuando se dio cuenta del miedo que se reflejaban sus ojos, no quería quedarse sola. Ella estaba parada a un lado de la cama esperando su respuesta.

-es que también voy a descansar- suavizó el tono de su voz –si quieres me quedo hasta que te duermas-

-no, yo me siento en una silla a tu lado, juro que ni sentirás que estoy allí- resolvió rápidamente y él suspiró profundamente y decidió quedarse.

-ok, me convenciste- se quitó sus zapatos -me quedo- comenzó a acomodar la cama, descubriéndola de las sabanas.

- yo no dije que te quedaras- murmuró sonrojada, con el ceño fruncido y la mirada baja, sin querer, sin darse cuenta había transmitido lo que decía su subconsciente, lo que en el fondo deseaba y no se animaba a decir.

-digamos que tienes una forma muy particular de transmitir lo que quieres- hizo su sonrisa de medio lado y se acercaba hacia ella.

-yo… si tu…. Es decir…- él la hacía tartamudear, no lograba organizar una frase coherente en su cabeza que le hiciera defenderse de si misma.

-shhhh… No tienes que decir nada- dijo de cerca y hubiese preferido no tenerla a una distancia tan corta.

                Su boca era una tentación divina, sentía que sus labios hablaban por sí solos incitándolo a un beso cada vez que la tenía cerca, nunca estaba satisfecho, nunca estaba saciado, ¡acaso no se podía controlar! Era estúpido si no lo hacía, ella era sólo una chica, mentirosa y falsa, pero que le encantaba.

-Mejor báñate, para que duerma mejor- le ordenó para liberarse de la situación y ella solo asintió, y sacudió su cabeza que solo pensaba en que él la estrechara en sus brazos y cubriera su boca con sus labios, hasta cuando le pasarían estas cosas por él.

                Ya estaba siendo hora que debía que dejar de tener esos pensamientos impuros y pecaminosos por ese ser. Ella tenía a su pareja, a su novio y aunque estuviese confundido, y tuviera sus defectos que se magnificaban delante de los de Peter, le debía respeto, ¡oh Dios! Tal vez esta había sido una prueba que él puso para determinar cuánto amaba a Agustín, si valía la pena sacarlo de sus elegidos para dejarlo ser feliz con ella, y de seguro había reprobado.

                Tenía que hablar con él y orar a Dios por su perdón, él más que nadie sabía que las cosas no sucedieron como ella quería y que si por su voluntad fuese en este momento estaría al lado de Agustín intentando convencerlo de su amor y de que al lado de ella sería más feliz que al lado de Dios.

                Se duchó en el baño en el cuarto, entre pensamientos locos, y oraciones pidiendo perdón por los mismos, rogando iluminar el camino que la guiara a manos del hombre que amaba, pidiendo por los buenos sentimiento de Peter para que la dejara ir, para que siguiera con su vida, desanimada porque si su padre no la había encontrado en la hacienda mucho menos lo haría acá en la ciudad.

                Peter se duchó en el baño de su cuarto propio, se colocó un mono con una camiseta y cuando regresó ya ella se había cambiado con algo de ropa que estaba en el closet y se secaba su cabello. Le parecía imposible que cualquier cosa que ella se pusiera la hiciera verse increíblemente bien.

                Haciendo gala de su adicción por el celular lo colocó en la mesa de noche y le dijo que se acostara en un lado de la cama, él hizo lo propio de lado contrario deseándole que descansara. Ambos  se colocaron boca arriba, en silencio, al parecer ni todo el cansancio que tenían los iban hacer dormir.

                Él la miraba de reojo, cuando pensó que tendría una esposa, no era precisamente en estas condiciones en las que temía que cualquier movimiento de su parte seria el desencadenante de una mala interpretación. Lali tenía ojos muy abiertos, y por un segundo quería tener el poder de leer pensamientos para saber lo que pasaba en la mente de ella en ese momento.

                Su mente viajaba entre las cosas que podía y no podía hacer, deambulaba con pudor por su figura desnuda y sus manos sobre ella, se sumergía en el deseo de hacerle el amor tan suavemente que la haría olvidarse de lo que sucedió, y chocó con la realidad de que no le tocaría ni un pelo. Decidió dejar de imaginar la cantidad de cosas que podrían suceder ahora que estaban en la misma cama y cerró sus ojos.

                Lali se preguntaba en porque a pesar de tener tanto cansancio y tanto sueño, y de estar en una cama completamente cómoda no podía dormir, miró el hombre que tenía a su lado, acompañándola, con sus ojos cerrados, su respiración lenta y obtuvo la respuesta a esa pregunta.

CONTINUARÁ