Capítulo 106 "TAPS: Custodiando Al Amor"

PENÚLTIMO CAPÍTULO!!!!

TE AMARÉ POR SIEMPRE: Custodiando Al Amor

Capítulo CVI: Última vez

Peter la observó notando el enojo que le había causado su actitud indiferente y no tardó más de

un segundo en tomar la decisión de acercarse a ella para “Contentarla”. Se acercó y lentamente la

abrazó a nivel de la cintura pero Lali quitó sus manos con brusquedad.

ÉL sonrió, apartó su cabello con delicadeza y comenzó a darle besos en el cuello pero ella se

movió en sentido de rechazo y tomó la almohada con la que iba a dormir para taparse la cabeza.

Peter rió, parecían dos niños, ambos, aunque ella estaba exagerando la situación le daba la razón,

no es muy lindo que te rechacen y después sin más se acerquen a ti, a cuenta de qué?

Bajó cerca de los pies de Lali, en búsqueda de las sábanas para arroparse los dos pero se le

ocurrió algo mejor: acarició suavemente sus pies con sus dedos y ella los movió en sentido de

rechazo y cuando los dejó de mover, él empezó a besarlos, pensó que ella iba a hacer algo pero

no, se quedó tranquila, entonces se jugó con ella lamiéndole la planta de un pie. Lali no pudo

evitar soltar una carcajada y manifestarse.

-deja Peter!!!!!- exclamó entre risas sin descubrir su cabeza. Él la miró maliciosamente como

expresión de su ocurrencia y subió entre sus piernas dejando besos en la cara interna de ellas.

Se erizaba su piel a medida que Peter trazaba su camino, evidentemente estaba cediendo ante la

excitación provocada por el frío de los labios de su esposo y él sentía como la temperatura del

cuerpo de su mujer aumentaba poco a poco.

Llegó hasta su abdomen, y desabrochó los últimos botones de su camisa, para poder besarla con

mayor comodidad, su intensión no era llegar a más, pero teniendo a su amor de ese modo ¿cómo

iba a evitarlo?.

Ella quitó la almohada de su cabeza, y con cierta fuerza de voluntad le dijo:

-aléjate Peter, tengo calor- quería distanciarlo, era más que obvio que él quería despedirse con

una noche juntos, sexualmente juntos; y el problema no era hacerlo, sino que sería la última vez.

Peter se encontraba entre las piernas de ella, y se llegó hasta su rostro para dejarle un beso en la

mejilla y susurrar en su oído.

-para tener calor estás bastante fría-Era una noche helada, y la calefacción estaba apagada, así

que era evidente para él que ella mentía.

-eso se soluciona con unas sábanas- resolvió mirándolo a los ojos, recordándole lo que acababa

de hacer.

-no te preocupes que yo lo puedo solucionar-

Y sin resistir más a su instinto la besó; y ella sin resistir más a su deseo le correspondió. Peter

subió sus manos a nivel del busto de su amor y paulatinamente desabrochó el primer botón. Ella

posó sus manos alrededor de la cara de él y después que él desabrochó el segundo botón lo

separó.

-no Pitt- dijo con los ojos cerrados, con la respiración agitada y con muy poco poder de

convencimiento.

-¿por qué?- preguntó él sobre sus labios -no quieres hacerlo?-desabrochó el siguiente botón

abriendo por completo la camisa, dejando al descubierto su pecho, haciéndole sentir un fuego

abrasador que solamente Peter apagaría.

Lo besó con intensidad siguiéndole su esposo el ritmo; temblando de frio, de pasión, de tristeza

por ser la última vez, de impotencia por no poder regresar el tiempo; quería drenar en un beso

todo lo que había en su interior, para lograr recobrar sus sentidos, y pensar con claridad.

-no es eso….- dijo ella mientras él se ocupada de su cuello.

-entonces?-

Intentó responder, pero él inició esos movimientos pélvicos que la desorientaron por un minuto,

o más. Ambos tenían sus ropas íntimas inferiores, pero el excitado miembro de él se hacía notar

por encima de su prenda, y al hacer eso aumentaba el deseo que ella tenía por unirse a él.

-si quiero hacerlo- dijo ya sumida ante la voluntad de su amado- pero no quiero despedirme-él

se detuvo y la miró a los ojos.

-una vez escuché que las despedidas son posibilidades de nuevos comienzos-

-¿y mañana?-

-que importa el mañana, cuando estamos así ahora! Dónde está la amante seductora que

apareció en el río?- ella se sonrojó y acarició sus labios con los de ella de una forma muy sublime.

-no me quiero despedir- susurró sincera.

-no nos vamos a despedir, nos vamos a unir para siempre.-

-Pitt, te juro que eres mi vida, te amo-

-yo te amo mucho, mucho más-

Se dedicaron a olvidarse de todo menos del amor que se tenían, se acariciaban sus labios con

suavidad, con placer, sintiendo un cosquilleo en su interior que se transformaba de felicidad a

pasión, y de pasión a amor y de amor de nuevo a felicidad.

Peter dejó sus labios y comenzó su recorrido sobre su piel con su boca, disfrutaba de cada parte

de ella sin pensar en el después, para él sólo existía el ahora. Seguía bajando no sin antes hacer

escala en una de las partes de su cuerpo que más le gustaban, sus pechos, los besó con ternura,

los manipuló con deseo, los saboreó con placer, con la realidad de un presente perfecto.

Bajó hasta sus pies, llevándose en su camino su prenda inferior, dejándola descubierta, pero al

subir ella se posicionó sobre él para disfrutar de su cuerpo del mismo modo, él se excitada un

poco más con cada beso, su sangre recorría a mil por hora, el contacto de sus labios era algo que

quedaría grabado en cada célula de su piel, y que nunca se borraría de allí.

Se deshizo de su bóxer, y cuando subió, él le quitó su camisa dejando su huella desde sus

hombros hasta detrás de su cuello. Las risas por parte de ella no faltaron, y por parte él

muchísimo menos, se divertían haciendo el amor, lo disfrutaban al máximo, les encantaba

hacerlo.

Entre tantas vueltas, entre tanto juego, él terminó entre las piernas de ella, y sin dudarlo ni un

segundo más se unió a su cuerpo. Todos los encuentros con Lali eran distintos, eran únicos,

incomparables entre ellos, jamás se aburriría de estar en la cama todos los días de su vida con

una mujer así.

Sintió como una llama pasional recorría su interior, como los galopantes latidos de su corazón

pedían que la poseyera de inmediato. Ella se aferró más a él, no le dolió que entrara, pero la

sorpresiva manera en que lo hizo le impactó.

Él no inició sus movimientos, hasta que ella le diera alguna señal, entendía que hacer el amor,

era algo de ambos, de a 2, y que cada uno tenía sus tiempos, por lo tanto, si era de esperar unos

minutos lo haría.Tan pronto ella abrió los ojos le dijo:

-te amoél

notó el brillo de su mirada, el temblar de su voz, lo agitado de su respiración, los latidos de su

corazón, el sudor de su cuerpo. Todo indicaba la veracidad de sus palabras y la besó para decirle

sobre su boca:

-Yo te amo tanto que daría sin dudarlo mi vida por tí-

E inició esos movimientos que cerrarían lo que sería un perfecto cuadro de amor. El sudor corría

por su piel, la sangre hervía de goce. Ella llenaba sus oídos con gemidos que denotaban

satisfacción mientras él dejaba besos en su cuello. Los movimientos eran lentos, pero

placenteros, sólo se querían deleitar con el otro.

Pasaban los minutos como si fueran segundos y ninguno de los dos se quería detener, hasta que

Peter se movía de un modo muy particular, aceleró sus movimientos pero no eran rítmicos,

buscaba algo, quería hacerla llegar al orgasmo, al multi-orgasmo y lo logró.

Ella perdió la noción del entorno, dejo de escuchar, de ver, solo sentía, tocó el cielo con la punta

de los dedos, sentía que no iba a poder mas, llegó el primero y el segundo orgasmo seguidos,

Peter sentía como vibraba su cuerpo, como se estremecía debajo de él, como gritaba de placer,

de euforia, sonreía y disfrutaba de haber logrado su cometido con su mujer.

Y justo antes de llegar al tercero, con la poca fuerza que le quedaba lo giró, tenía muy poca

energía, pero la suficiente como para hacerlo disfrutar a él. Le dedicó una sonrisa y le clavó su

mirada en sus ojos olivas, con intensiones de hacerlo pasar por el mismo éxtasis que pasó ella.

Se movía sobre él como toda una experta, sus manos se entretenía con su busto, mientras ella

apoyaba las suyas sobre su pecho. No tardaron mucho en llegar ambos al clímax de la situación,

bastante tiempo después de haber comenzado.

Lali simplemente se desplomó sobre él, con una sonrisa, pero sumamente agotada. Peter

simplemente se relajó sobre la cama, intentando recuperar el aliento de una de las mejores

noches de su vida.

SEAN FELICES

*GMR*