Abre Tu Corazón: 111

IMAGEN DE: mi vida laliter =)

Abre Tú Corazón
Capítulo 111: movimientos extraños.

-Lo hizo apropósito- reclamó Marisol cuando Lali se alejó lo suficiente.

-¿qué?- la miró aún estaba sorprendido porque Lali no hubiese reaccionado de una manera violenta… ni de ninguna otra. Antes por menos había formado problemas sin sentido, y ahora… nada…

-Mar, vino hasta acá a interrumpirnos apropósito.

-nada que ver.

-claro que si, te podía decir eso en otro momento.

-Estas alucinando.

-¡ay, por favor! Si hasta tu mismo te has cansado de su instinto celopata posesivo.- le incomodó que se refiriera así sobre ella, solo él podía decirle así.

-Marisol, no le digas así, y no te enfrasques en eso, ¿si?

-pero…

-mira si seguirás con el temita avísame y me voy a otro lado mientras se te pasa. No estoy de ánimos de otra escenita.

-no, no… tranquilo… si tú dices que no pasa nada, entonces te creo. – se puso de puntillas y le dio un corto beso.

Días después…

Lali estaba incomunicada, había perdido el teléfono en el lago, y no lo pudo encontrar. No se podía comprar otro ya que como ya no era la presidenta perdió derecho a la beca por los momentos y cada centavo lo ahorraba celosamente para los gastos necesarios.

Peter seguía avanzando con Marisol, o eso fue lo que escucho un día en la cola de la cafetería, y la sola idea se le hizo tan repugnante que le quitó el hambre. Ocupaba su tiempo en la campaña, tenía que reorganizar sus prioridades, como le aconsejó Nicolás tomar su tiempo para ella misma.

Lo que más le preocupaba era no poder comunicarse con Thiago, no tenía como, y él tampoco tenía como enterarse que andaba sin celular, a menos que la visitara sorpresivamente un día, y no se había dado el caso.

Viernes en la tarde, pasillos del colegio.

Lali estaba concentrada en la campaña, DIAS era lo que tenía para subir las encuestas, pero Peter tenía la delantera, Agustín tenía demasiado poder de convencimiento. Indirectamente sabía que la estaba presionando por su bien, pero había momento es que los odiaba a ambos.

-Marianella Espósito- escuchó su nombre como ya nadie la llamaba. Todos la conocían por su segundo apellido. El inspector enviado por el ministerio de educación que hacía de suplente a Justina se paraba al frente de ella obstruyendo su paso. Alto, imponente, amenazante.

-sí, dígame director.- le respondió con cordialidad, no le iba a mostrar el miedo que él quería causar.

-Antigua presidenta del centro de estudiante.

-si…- confirmó dubitativa sin saber a dónde se dirigía con esta afirmación.

-y en la actualidad te estás lanzando nuevamente a la presidencia en contra de quien considero, un candidato ejemplar ¿no?

-no entiendo a donde se dirige con semejantes descripciones señor inspector, si quiere decirme algo, adelante, no me gusta andar con rodeos- expresó con respeto.

-Directo suplente- aclaró- muy bien, le pediré algo: Renuncie a la candidatura.

-¿Por qué?- estaba sorprendida por semejante petición, pero había aprendido que mostrar tus emociones era un signo de debilidad.

-porque sospecho de mala gestión durante su mandato, y si es cierto, si llego a comprobar semejante falta, usted quedaría expulsada de la institución.

-en primer lugar señor director suplente, no hubo mala gestión, en segundo lugar conozco la reglas de la institución y en tercer lugar, si llegase haber alguna falta renunciar a la candidatura no me salva del castigo.

-tu palabrería no me engaña.- la confrontó

-sus amenazas no me intimidan.- no se dejó intimidar.

-si llego a comprobar los movimientos extraños que hiciste, te voy a hundir niñita.

-¡señor director!- le gritó una señora regordeta que daba clases de música a los alumnos de primer año- ¡Ay, Señor directo! ¡¡Al fin lo encuentro!! tenemos problemas con los alumnos de primer año-  lo tomó del brazo.

-Estoy ocupado.-

-No señor director- dijo con voz dramática- ¡¡usted no entiende!! Esos demonios que dicen ser estudiantes usan los instrumentos para todo, menos para hacer música ¡¡Destruyen mi santuario!! ¡es una emergencia NacionaL! ¡código rojo! – lo haló con fuerza y prácticamente se lo llevó en contra de su voluntad, Lali no pudo decir nada más, ni él tampoco.

Tenía que hablar con Kika, no había de otra. Entre tantos problemas se había olvidado de presentar cierre de su gestión haciendo cuadrar ciertas cosas y ocultando inteligentemente la evidencia.

Habían cosas que le parecían injustas, y a veces tenía que realizar ciertas acciones en contra de la institución para favorecer sus creencias e ideales… no era malo, pero si iba en contra del reglamento. Justina no desconfiaba de su criterio y jamás la había descubierto, pero este tipo parecía querer hacerle la vida imposible.

“para variar, otra raya más al tigre”

....

GRACIAS DE TODO CORAZÓN POR LAS FIRMAS!!! llegue super estresada de la uni y esto me relajó un montón jajajajajajaja

Me encanta leer sus comentarios, me recuerdan cosas de la novela que uds toman en cuenta y que a mi se me olvidan, y leer sus teorías me inspiran a escribir…. LAS ADORO LECTORAS FIRMANTES!!!! Ya sea por TW, WA (WhatsApp) o Aquí mismo en el blog! <3

Anónimos identifíquense....

Creo que tendré más cuidado la próxima vez que diga que si firman hay más caps jajajajajaja

ESTE FIN DE SEMANA MARATÓN!!! Les gusta la idea??? Pero no será cualquier maratón... será una MARATON ESPECIAL!!!!!  muajaja......

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