Abre Tu Corazón: 140

Abre Tú Corazón
Capítulo 140: locura

-Amor…-le dio un corto beso en sus labios que no fue correspondido.

Lali no había sabido nada de Peter durante la primera hora de clase, por más mensajes y llamadas que le hizo éste no contestó. Se lo encontró a la segunda hora cuando llegó al salón de clase 10 minutos antes de que ésta empezara.

-hola…- la saludó él con desánimo.

-¡Dios, te ves terrible! ¿No dormiste bien?

-trabaje hasta tarde, ¿tu? ¿cómo te fue en tu cita de ayer?- respondía indiferente.

-me fue bien.- dijo tranquilamente mientras acomodaba su lugar de trabajo, como siempre.

-mmm…- “descarada”- ¿no pasó nada?- preguntó suspicaz.

- ¿nada cómo qué?

-¿no intentó acercarse?- se rascaba su mentón mientras ella pensó un segundo antes de responder.

-lo normal.- dijo al final con naturalidad, sacó su cuaderno y lo colocó en la página correspondiente para tomar sus notas de la clase.

-o sea, todo como amigos- levantó una desconfiada ceja, pero Lali respondía con tranquilidad.

-podría decirse.

-¿¡quieres dejar de responder vagamente y decirme exactamente lo que pasó!?- había rudeza en su voz, mas sin embargo no levantó el tono, se habían sentado en uno de los últimos lugares y de este modo no llamaba la atención el ambiente tenso que había en su rededor.

-te estoy respondiendo lo que pasó Peter.

-te falta algo…

-¿algo como qué?- se miraron fijamente a los ojos, como retándose el uno al otro con la mirada a decir algo más. Peter se sentía con una batalla interna entre decirle la verdad y reclamarle su desliz de la noche anterior, o quedarse callado y seguir haciendo cosas hasta que ella se delatara, para ver hasta donde era capaz de llegar.

-olvídalo…-dijo él al final. Pasaba una mano por su cabeza como si de este modo pudiese organizar sus pensamientos, sus sentimientos. Lali guardó silencio unos minutos, la situación, el ambiente entre ellos dos era denso y apenas se miraban de reojo.

-¿sabes? Eso me molesta de ti – rompió el silencio Lali -tú estuviste de acuerdo con que fuera a esa cita, ¡ahora no entiendo porque te molesta que haya ido!- exclamó en susurros tentando la paciencia de Peter.

 -¡Lo que me molesta es que no me digas que fue lo que pasó!

-te lo estoy diciendo Peter-

-no me dices todo Marianella.

-ok, no entiendo- se cruzó de brazos mirándolo de frente -¿ hay algo que me quieras reclamar puntualmente?- Peter calló un segundo, gritando en sus adentros lo que su mente quería expresara, pero a la final se controló.

-no

-entonces deja de decir tonterías…- se sentó mirando el pizarrón, tomando un lápiz, y colocando datos en su cuaderno.

Peter cedió un poco al verla tan distante a pesar de tenerla a su lado, estúpidamente sentía que la engañó, a pesar de que ella fue la infiel, él comenzó primero. Acercó mas su silla a la de ella y la abrazó por la cintura.

-no me gusta pelear contigo– Ella suspiró y sucumbió a sus sentimiento cuando él le dio un beso en la mejilla.

-a mi tampoco.– giró su cabeza y le dio un corto beso en los labios.

-¿entonces porque peleamos?

-no lo sé… no peleemos… - él le aparto el cabello de su rostro –es mejor cuando nos amamos - la acercó para besarla más profundamente.

-Esa es una promesa que cumpliré esta noche.- selló esa cita con otro beso y se separaron para iniciar la clase.

Día siguiente: Locura.

Peter había ido la noche anterior a su recamara para cumplir con su promesa de amarse, casi al amanecer se fue a su cuarto, estaba enloqueciendo entre el personaje que creó y su verdadero yo, y más aun cuando su amor parecía preferir sin escrúpulos a ese personaje.

Dos horas después de haberse ido, y con la locura apoderada de él se apareció en la habitación de Lali como Thiago, para alimentar su paranoia, ella correspondió perfectamente a sus caricias, a sus besos, al sexo. Un “rápido” de bienvenida, caricias lentas, suaves y sublimes, incluso palabras de amor que de vez en cuando se escaparon en una segunda vez, los acompañó esa mañana.

Thiago se sentía mal, Peter se sentía peor. Thiago le quitaba el amor de Lali, Peter se estaba volviendo loco.

-esto no puede seguir así.- dijo Lali una vez que terminaron sentándose en la cama, las manos le temblaban y su voz parecía distante. Peter, Thiago, alguno de los dos se sentía feliz de que por fin sintiera cargo de conciencia.

-la pasamos bien…- respondió Thiago indiferente. Comenzó a colocarse su ropa.

-se trata solo de sexo, ¿no?- su voz se quebró cuando hizo esta pregunta.

-¿Quieres tener algo más?

-está Peter…- susurró.

-de esta manera nos puedes tener a los dos– Lali abrió los ojos sorprendida y optó por comenzar a vestirse, rápidamente.

-tienes que estar bromeando.

-si estás conmigo es porque algo no está bien con él.

-eres un enfermo…

-Tu eres quien esta está jugando a dos puntas.

-¡solo……vete! ¡Quiero estar sola!

Peter quiso consolarla, abrazarla, decirle que él era que por idiota la había puesto en esa condición de confusión, de duda. Pero no pudo, ella lo había traicionado, porque él la engaño antes pero no quita los hechos, así que prefirió irse a meditar como terminar con esta situación.

4:56pm Casa del árbol.

No había lugar del colegio donde Lali se sintiera bien. Se sentía presionada, atosigada, triste, decepcionada, engañada, manipulada… entre otras cosas. Un objeto. Y no había llegado a la conclusión de cómo iba a manejar esto de otra manera que no fuera alejarse. Con su bolsa con la prueba del delito, subió a la casa del árbol, con la esperanza de encontrar paz, pero se lo encontró a él.

-La, ¿a dónde vas?- preguntó Peter cuando vio que Lali se regresaba.

-no se, solo quiero estar sola.- preguntó con la voz más triste que le había escuchado.

-¿qué te pasa?- cuestionó preocupado.

-nada, no me pasa nada.

-¿te peleaste con Nico?

-¡no me pelee con nadie, solo quiero estar sola!- respondió a la defensiva y hasta un poco agresiva.

-Está bien.- respondió enojado- Si hoy te vino la menstruación no la pagues conmigo.

-tu perfectamente sabes que hoy no me vino la menstruación.- los ojos de Lali botaron par de lágrimas, ya no podía más.

-¿qué?

-estuvimos en la mañana juntos, solo por eso debes saber que no estoy en mis días.

-¿de qué hablas?- cuestionó ya sabiendo la respuestas antes de siquiera formular la pregunta.

-¿de qué hablo? ¡¡De esto hablo!!- le lanzó la máscara con el sweater que tenía en su bolsa y el rostro de Peter palideció.- ¡¡enfermo!! ¡Loco!- las manos de Lali temblaban. Toda Lali temblaba. – ¿hasta cuando pretendías engañarme? ¡¡¡Te di mil oportunidades Juan Pedro!!! ¡¡¡Estuvimos juntos mil veces!!! ¡¿¡¿¡Qué te pasa?!?!?! ¡¿¡¿¡Porque juegas conmigo de ese modo!?!?!

....


LLEGANDO DE DOS SEMANAS DE PASANTÍAS FUERA DEL HOSPITAL, me tienen dando tumbos por mi país GRACIAS por la paciencia.


Así van las cosas:

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Anónimo	Argentina
Anónimo	Argentina
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Lu	Argentina
Lore456	Argentina
Manuela	Argentina
Milagros	Argentina
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noves_laliter	Brasil
Andre	Chile
Carolina	Chile
Anónimo	Chile
Sady varas	Chile
Anónimo	Chile
Valeria	Colombia
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Liliana	Colombia
Marchu	Colombia
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Karem	Colombia
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Dioselina	Ecuador
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silvia_fnt	España
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Andrea	España
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Genesys VENEZUELA