Abre Tu Corazón: 114

Saludos a: Nara de Brasil, Hilary, ligia (perú) nuevas lectoras que han firmado en varios caps, leo sus comentarios nenas, GRACIASSS por hacerme saber que leen =D

ANONIMOS identifiquense!!!! no tengo modo de saber quienes son si no lo hacen, así sea en el comentario que coloquen su nombre.

Abre Tú Corazón
Capítulo 114: salvaje y dulce.

Un beso. Lali se dijo a si misma que un besito, inocente, cortito, era suficiente para calmar estas ganas de Peter que tenía dentro de su ser. Él, apenas ella tocó su mano, la haló hacia su cuerpo para darle ese beso que necesitaba. No fue dulce, fue exigente. No había amor, había pasión. Sus manos enredaron en su cabello para que no se separara hasta que fuera saciada su necesidad, pero ésta cada vez se hacía más y más grande. De la misma forma que comenzó el beso se terminó. Lali lo alejó y Peter a regañadientes, sin saciar en lo más mínimo su necesidad, la soltó.

Lali respiraba profundo, intentando tomar aire y entender la situación. Se apoyó del mesón recordando los motivos por los cuales estaba separada de Peter, pero no lograba ubicarlos. “amigos ¡ja! Si claro” Ya se imaginaba como iba a ser esta amistad.

Peter se sentía dividido, mataría a Benjamín si se aparecía en este instante solamente para estar con ella. Pero a la vez quería dejar las cosas así e iniciar una vida nueva sin Lali. Ninguno de sus pensamientos era concluso, ni se conectaban entre sí. “¿Desde cuándo no me sentía tan vivo? ¡Ah, claro! Desde la última vez que le di un beso a Lali”. Y en este momento solo podía pensar en una sola cosa.

-muero de ganas por hacerte el amor- dijo antes de siquiera saber que lo había pensado.

-¿qué?- Peter abrió los ojos de par en par, no era lo quería decir, o por lo menos no así, mejor dicho, no a ella, ni a nadie, tenía que quedar en su mente, era una confesión demasiado profunda para sí mismo, peor decírselo a ella.

-Disculpa, pensé en voz alta…- bajó la mirada pasando una mano nerviosa por su cuello, intentando calmar la tensión acumulada allí de la cual no era consciente.

-ah…- ella pasó las manos a través de su cabello, Peter la había descontrolado completamente “piensa Lali, cálmate” en este momento era tan vulnerable como un recién nacido, tenía que levantar sus murallas, tenía que recobrar la conciencia antes de que él se diera cuenta y se aprovechara de ello.

-Pero es la verdad…- levantó la mirada en un acto de valentía “si la vida te da limones, haz limonada”

“¡no! Él iba a hablar y ella no se iba a resistir y se iban a ir al pasto y…”

-Peter, no digas nada por favor…- él se armó de valor, de todos modos no tenía nada que perder.

–muero de ganas por hacerte el amor, aquí, ahora- confesó y la tomó de la cintura con suavidad - salvaje y dulcemente… te extraño terriblemente Lali, como novia, como amiga, como confidente, como amante, y en este momento esta última es la que más predomina.- susurraba mirándola a los ojos profundamente, ella no le desviaba la mirada

-yo…

-escucha, solo necesitaba que lo supieras, no era para que…

-yo también muero de ganas porque me hagas el amor.- dijo antes de arrepentirse y ocultó su avergonzado rostro en el pecho de él, ella también lo extrañaba terriblemente y no lo iba a negar. Peter sonrió.

-¿aquí y ahora?- cuestionó Lali asintió sin levantar a cabeza y él se rió. – ¿salvaje y dulce?- asintió de nuevo y Peter la abrazó un poco más fuerte, hablándole sobre su cabeza - te pareces mucho a la “Lali” de años atrás…- ella levantó su rostro quedando muy cerca de sus labios – toda sonrojada y apenada por expresar lo que siente.

-¿no se trata de recordar? ¿De imaginar que no cometimos tantos errores?

-te amo- dejó un corto beso en sus labios y ella pasó los brazos por su cuello.

-yo te amo…-

Profundizó más el beso y él la abrazó aun más fuerte, como si quisiera fundir sus cuerpos en uno solo para no separarse jamás. Exploraban sus bocas con una sensualidad incitadora, con caricias sublimes que extrapolaban sus mundos a niveles desconocidos.

No se daban cuenta de lo que hacían, o por lo menos no con la claridad de pensamiento de personas que no se encontraban en el espacio adecuado, solo sentían la necesidad de algo, y se dejaban llevar por ello.

-¡si! ¡¡Después me miro y yo me quería morir!!

-¿y qué le diiste?

-Nada, salí corriendo y….- las voces no identificadas se disolvieron en la medida que se fueron alejando del salón de clases.

Lali se ubicó en tiempo y espacio y recordó vagamente que hacía segundos, tal vez minutos, había sonado el timbre de fin de las clases de la mañana. Alejó un poco a Peter quien estaba concentrado en terminar de desabrochar los botones de su camisa.

 -algo puede salir mal- dijo con voz agitada, y detuvo las manos de él, estaba con el cabello despeinado por ella misma, su camisa sabrá Dios en que parte la había tirado “¿en qué momento la quité?” se cuestionó a sí misma, correa abierta, labios hinchados… ese era el aspecto de Peter, no quería saber como estaba ella misma. Era demasiado obvio lo que estaban haciendo, su aspecto decía más que lo que había pasado.

-no va a venir nadie…- quiso tranquilizarla él, pero ella lo alejó y le dio la espalda pasando una mano por su cabello.

-es mediodía y es un salón de clase Peter- se giró para verlo- por supuesto que puede venir alguien.

- pero no va a venir…

-¿Cómo sabes?

-no lo sé- se encogió de hombros -pero tomemos el riesgo, La. Yo quiero tener esta experiencia contigo…- le sonrió de una forma traviesa mirando primero su rededor y después a ella- ¿tu quieres?- estiró su mano esperando que ella la tomara, aceptando “correr el riesgo”; y sin dudarlo así lo hizo. Corrieron hacia la puerta como quien comete una travesura, y cerraron con llave. Para asegurarse colocaron el escritorio y de ese modo bloquear la entrada, por si acaso alguien forzaba la cerradura.

-esto no está bien.- dijo una vez más, observando a Peter que terminaba de rodar el escritorio.

-tienes razón – ella lo miró sorprendida, él por lo general no desistía de una idea que se le ocurriese, de un modo muy tierno era extremadamente testarudo y siempre terminaba haciendo lo que quería -el escritorio me parece una exageración, si apagamos las luces no van a creer que aquí hay alguien-

-hablo de lo que vamos a hacer Pitt.- obvió y él se mordió el labio con una media sonrisa- ¿Qué?

-¿no quieres que pase nada y me dices Pitt?- cuestionó con picardía.

-eres un pervertido- le lanzó las llaves y él las atrapó sin problema - ¿cómo te puedes excitar solo porque digo un apodo que te puede decir cualquiera?

-Primero: solo contigo convierto en un pervertido; segundo: yo no soy el que se excita con una mueca con la ceja y una sonrisa compradora, ESO si es perversión y tercero: es muy tarde para arrepentirse- le mostró las llaves y las batió con sentido de posesión.

Lali sonrió, tenía claro que si se echaba para atrás en este momento, el mismo Peter abriría la puerta, pero…

-¿y quién te dijo que me quería arrepentir?

Peter rió y se acercó a ella, la besó recostándola sobre el escritorio y colocó las llaves allí arriba para terminar lo que hacía minutos comenzaron.

....

Dedicado a Dani, primera que firmó! 

FELIZ CUMPLE KARLAAAA!!! =) 

Comenten un montón =D no crean que se me olvido lo de la TwittCam MARATÓN; lo que pasa es que se ha pospuesto por eventos no predecibles.... PREPARENSE para el próximo FIN DE SEMANA!!! =D Viernes o sábado: TwittCam MARATÓN =)